En la incursion en los libros digitales me llevó a leer una historia que desde hace mucho quis leer. La Mano de Fatima de Ildefonso Falcones.
No daré una humilde opinión de este libro, pues aún no lo termino, lo que no evita decir que es una de las obras mas bellas que he leido. En ella me tope con una frase que me llevo a hacer una gran reflexión.
«No todas las imágenes son tan simples; muchas de ellas reflejan aquello que esconden los libros»
La frase la pronuncia un discipulo de Da Vinci, quien pintaba un fresco en la Catedral de Córdoba, haya por los viejos siglos en que la Ciudad había sido liberada de los Moriscos o mas bien invadida por los Cristianos, como ustedes crean, el caso es que la gran mezquita de occidente se estaba convirtiendo en una Catedral.
No ahondaré más en la historia, eso lo haré en su momento, me quedó con la frase. Muchas veces escuchamos decir que una imagen vale más que mil palabras, y es que los libros no son más que imagenes descritas que nos regalan la libertad de recrearla a nuestra manera, las letras mismas son iconos, imagenes dibujos.
Han habido tantas guerras por esta divergencia, hay unos que creen que las imagenes no son suficientes para encerrar lo que si hacen las palabras y otros defienden que las palabras son solo un vago intento de igualar la imagen.
Disfruto de las pinturas de los grandes, desde Dali a Miguel Ángel y Da Vinci, El Greco, Rafael etc, etc, en todas ellas podríamos encontrar historias que tal vez todos conocemos o bien inventarnos una, sin embargo, un buen libro, ya sea la Biblia o una novela de Falcones, nos pueden regalar momentos inolvidables incluso transformarnos.
Será que un dia podemos dejar de peliarnos por saber quien tiene la razon, al fin y al cabo que los que decidimos en que creer, y transformamos lo que creemos o elegimos entre opciones somos nosotros, Dios sigue siendo el mismo, el concepto de bien sigue siendo el mismo, lo correcto sigue siendo lo mismo. Si eso lo hubieran comprendido Cristianos y Musulmanes desde tiempos inmemoriales, la historia de la humanidad sería hoy, menos roja y oscura, y más llena de luz.
Pero por desgracia somos de este mundo y tenemos que aprender a vivir con sus errores, no hay de otra…
¿O si?
Muy buena reflexión forastero, las imágenes han sido utilizados durante mucho años en un simbolismo para querer decir muchas cosas sin palabras y que pueden contener un contenido muy amplio en el cual reflexionar. Cuando creamos la carátula de una portada, queremos decir en el, muchas cosas, queremos transmitir un montón de sentimientos. Las personas en una pintura puede interpretar, muchas cosas diferentes, tal ves eso paso con los cristianos y musulmanes, cada uno entendía un concepto de una forma diferente.
Es posible que asi sea.