Llovía también aquel día,
era media tarde
y el cielo crispado de nubes
dejo caer el agua a gotas,
a chorros, a torrentes.
Y te tomé.
No fue inconsciente,
te deseaba, te besé.
Sin percibirlo ambos nos desnudamos,
la lluvia era la melodía romántica
que acompañó el acto de entrega más puro.
Hoy llueve y te marchasteis,
aún me parece verte doblando la esquina
diciéndome adiós bajo tu paraguas rosa,
y tu imagen se borra.
Se borra como aquel día parecía borrarla la lluvia.
Cuando invades mi mente
es cuando recuerdo que mi corazón
es una selva arrasada
y mi ser un yermo desierto.
Te extraño…
No puedo negar mi pasado,
tú eres parte de él.
Lo es aquel día
llovía también aquel día.
Autor: Aldo Gutiérrez, El Brujo Blando
Aldo, me ha parecido muy bonito tu poema. Fluye como la lluvia, pero como sé que esperas mi opinión técnica al respecto (…jejeje) Lo único que puedo decirte es que todavía estás muy pegado al tradicionalismo y la trivialidad, a veces, puede hacer perder la fuerza del sentimiento único y personal que querés transmitir. Te felicito. Sigue adelante.
Gracias por tu critica, y por tomarte el tiempo de leerlo, tomaré en cuante tu muy elocuente observación… Thanks..
Muy lindo aldogal. Parece que estaba lloviendo cuando escribiste este poema. La lluvia te inspiró
Si fue la lluvia la culpable…