Ayer me sentí triste,
el destino juega y no nos hace participes.
Ayer me sentí triste,
la impotencia es poderosa.
Ayer me sentí triste,
pues veo el futuro y lo veo incierto.
La ansiedad de no saber que vendrá,
se convierte en tristeza
cuando nos damos cuenta
que el cruel destino es el que manda.
Pero, ¿Quién manda al destino?
Si claro, «En Dios confiamos»
es tan difícil confiar
cuando la impotencia
se convierte en rabia y de sosiego.
Ayer me seni triste,
no confío, no se que vendrá
pero el no confiar y no saber
me llevara a decir en mi mente
«En Dios confiamos», pues al final
los que creemos sabemos que
«En Dios confiamos»
Autor: Aldo Gutiérrez, El Brujo Blanco
Me gusta mucho el poema en Dios confiamos porque hay dias que esta melancolico
Muchas gracias por visitar mi blog Soledad…
Creo q hay dias q uno se siente asi a mi me ha pasado……te comprendo
Gracias Areceli, ya se le extrañaba aca en mi blog…
….. 😦 que triste poema…. 😦
Estaba triste como comprenderá